Vistas impresionantes y acogedora atención

Las vistas desde las terrazas son espectaculares, especialmente por la noche. El personal se mostró siempre amable y dispuesto a ayudar, y la habitación era amplia y cómoda. Además, el vino casero que ofrecen es una delicia y lo compartimos con otros huéspedes durante una agradable tarde.

Sin embargo, el hecho de no contar con un ascensor puede ser un inconveniente para algunos, especialmente si llevan equipaje pesado o tienen dificultades de movilidad. Esto podría ser algo a considerar antes de reservar.

Las vistas desde nuestro balcón eran impresionantes y el desayuno al lado de la chimenea en las mañanas frías fue un toque encantador. El personal fue increíblemente hospitalario y compartió recomendaciones locales que hicieron nuestra estancia memorable.

Los panecillos caseros fueron un verdadero festín, eran como un abrazo cálido en cada bocado. Las vistas desde la terraza eran espectaculares, especialmente por la noche, donde Tbilisi se iluminaba como un cuadro. Además, el personal fue increíblemente amable, guardaron nuestras maletas con mucha atención mientras disfrutábamos de la ciudad.

Aunque nuestra habitación era un poco pequeña, el ambiente era acogedor. Sin embargo, el ruido de la sala de calderas podía ser un poco persistente, pero con las vistas que teníamos, todo lo demás brillaba.

Disfrutamos mucho nuestra estancia cerca del Teatro de Ópera y Ballet de Tbilisi. Nos encantó probar los vinos locales, especialmente con mi amigo en la terraza, donde las vistas eran impresionantes. El personal siempre nos ayudó con recomendaciones geniales para almorzar.

A mis hijos les hubiera gustado más variedad en el desayuno.

las vistas desde la terraza son impresionantes. el desayuno podría tener más variedad.

Pasamos 2 noches en una habitación doble estándar. Las vistas desde la habitación eran encantadoras y disfrutamos mucho del ambiente. Sin embargo, el hotel no tiene ascensor, lo cual podría ser complicado para quienes llevan equipaje pesado. A pesar de eso, todo lo demás estuvo bien y recomendaría este lugar para una estadía corta.

un espectáculo desde la terraza al anochecer. con vistas a la catedral iluminada

vistas espectaculares, barrio tranquilo

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